Asociación para el Fomento de los Estudios Históricos en Centroamérica

1Toribio José Calvillo y Saldivar no representa una figura excepcional en el cuerpo de la regular observancia de San Francisco pero no por eso deja de ser interesante su carrera, que refleja algunos aspectos de la vida conventual.

2Había sido acceptado en el convento a la edad de 16 años y sospechamos que se trata de un criollo. Tenía apenas 30 años cuando lo localizamos por primera vez actuando en la Guatemala destruida por los terremotos de 1773. Forma parte de los eclesiásticos que se niegan entonces rotundamente a trasladar su convento hacia un nuevo sitio.

3Hasta 1785 no tenemos ninguna noticia de su actividad. Aparece después como Comisario Visitador de su orden. Las fuentes notariales nos revelan un tipo de relación bastante estrecha con Antonio Pinillos, un comerciante español originario de Calahorra que murió en 1791. Este último mandaba en su testamento a sus albaceas que « den destino a dicho mi principal (de 900 pesos que tiene a usura Antonia Figueroa y Dominguez) conforme les dictare el R P Fr Torribio José Calvillo de la regular observancia de San Francisco y capellan actual del colegio de Niñas por tener comunicadas las cosas del descargo de consiencia». Es poco. Pero el hombre aparece más tarde en un puesto estratégico dentro de la orden franciscana porque era, en 1795, hermano mayor de la tercera orden que se componía entonces de Alejo Mariano Bracamonte, de Francisco Dorantes, de Juan Nepomuceno Martínez, de José Joaquín Mendoza, y de José Leandro Benítez. La tercera orden tenía entonces la responsabilidad de administrar las obras pías fundadas en San Francisco, las cuales producían los intereses necesarios a la vida material de la orden.

4En 1797 Calvillo acumulaba muchos títulos : aparecía como jubilado, predicador general de jure, Notario Apostólico y del Santo Oficio, Comisario del Santo Tribunal en las provincias de Quezaltenango, Totonicapan, examinador sinodal de este arzobispado y de los obispados de Oaxaca y Puebla, ex guardián de este convento grande, custodio de la provincia de Guatemala, dos veces visitador de ella y actual comisario visitador general de los padres misioneros de Propaganda Fide de este Reyno !

5En febrero de 1798, Calvillo renunció como capellán del Colegio de Niñas, siendo entonces rectora del Colegio María Manuela Balcárzel. La última huella que pudimos localizar se encuentra en las actas del cabildo de la ciudad, cuando en 1814 intentó que la corrida de toros, entonces alquilada a un comerciante, fuera suspendida, alegando que el día 30 se celebraba en la Iglesia de su convento la festividad de la Virgen Santísima en la advocación de Nuestra Señora de los afligidos. Signo de los tiempos, los miembros del cabildo no le hicieron ningún caso. Se negaron a cualquier tipo de medida suspensiva.