Asociación para el Fomento de los Estudios Históricos en Centroamérica

1Los primeros estudios los realizó en su pueblo natal para posteriormente trasladarse a la capital provincial, Ciudad Real. Allí ingresó al Seminario de la diócesis, donde permaneció cuatro años, de 1810 a 1814. En este año abandonó el plantel tras renunciar a la beca. Mas tarde, sentó plaza como alférez de la Compañía de Milicianos en Tuxtla, donde alcanzaría el grado de capitán.

2En 1823, tras el derrumbe del imperio de Iturbide, se constituyó la Junta Suprema Gubernativa con los representantes de los partidos de la provincia, entre los que se hallaba Gutiérrez. Fue esta misma Junta la que se decidió por declarar la libertad absoluta de Chiapas. Los simpatizantes de la unión con México vieron esta acción como desfavorable a sus propósitos, por lo cual se acercaron al gobierno mexicano para promover una acción en contra de lo dispuesto por la Junta Suprema. El ministro mexicano, Lucas Alamán, envió así una orden al general Vicente Filisola para que la disolviera, lo que consumó en los primeros días de septiembre. Ante lo actuado, se suscitó un movimiento armado en la provincia y la proclamación del llamado “Plan de Chiapa Libre”. Este Plan se pronunció por la libre determinación de la provincia y la salida de las tropas mexicanas, las cuales evacuaron Ciudad Real a comienzos de noviembre y se dirigieron a Tehuantepec, previa reinstalación de la Junta Suprema Gubernativa. El Ejército de las Tres Divisiones Unidas – compuesto por contingentes de Tuxtla, Comitán e Ixtacomitán - entró en la capital provincial. Entre los jefes militares se encontraba Gutiérrez. Dos semanas más tarde, el alférez Joaquín Velasco se rebelaba en contra de la Junta Suprema y se proclamaba partidario de la unión con México. Acto seguido se atrincheró en el cerro de San Cristóbal, en las afueras de Ciudad Real, y contó con el apoyo de civiles. Los contingentes de Tuxtla y Comitán procuraron llegar a un acuerdo con los alzados, según el cual se determinaría la unión a uno u otro país mediante el voto de los representantes de los partidos. Por el lado del Ejército de las Tres Divisiones Unidas negociaron Tiburcio José Farrera y Joaquín Miguel Gutiérrez. El acta respectiva se firmó el 27 de noviembre. Sin embargo, cuando Gutiérrez llegó en la mañana de la rendición a la cumbre del cerro no encontró a nadie allí. Los sitiados habían decidido huir al temer que las garantías convenidas no les serían cumplidas.

3En diciembre la Junta Suprema convocó a decidir sobre el punto de la agregación de Chiapas ora a México, ora a Centroamérica. Cada representante de partido debía manifestar el voto de sus representados. Joaquín Miguel Gutiérrez no contaba, empero, con los poderes necesarios para expresar el voto de su partido, el de Tuxtla. Ante esta situación, se dirigió a los dirigentes del partido para solicitarles la concesión de los poderes. El 8 de enero de 1824 los representantes del ayuntamiento tuxtleco convinieron en otorgárselos.

4De esta manera, Gutiérrez expresó la voluntad del partido de Tuxtla en la votación que habría de decidir el destino político de la provincia, una voluntad inclinada a la unión con la República Federal Centroamericana. Antes de ello, Gutiérrez había manifestado sus simpatías por la unión a México, lo que le conllevó una situación ríspida con el ayuntamiento tuxtleco, que logró ser remontada por la disponibilidad del cabildo en reiterarle su confianza. Con todo, el recelo resurgió cuando la unión a México fue proclamada en septiembre de 1824. Informado el ayuntamiento tuxtleco de que la votación había sido en apariencia manipulada por algunos funcionarios, pidió a Gutiérrez que aclarara lo que había pasado. Los ánimos exaltados fueron apaciguados tras su intervención, con lo que el cabildo tuxtleco aceptó la incorporación a la República Mexicana.

5Fue diputado por su provincia en el Congreso Nacional. Su permanencia en la ciudad de México le permitió entrar en amplio contacto con los círculos políticos nacionales. Surgieron en este tiempo en México dos logias masónicas: la de York y la escocesa. Joaquín Miguel Gutiérrez se adhirió a la de York, en la que militaba Vicente Guerrero, antiguo insurgente mexicano, y con quien entabló comunicación. En 1826 compró una imprenta y con ella imprimió, a partir de mayo de 1827, el primer periódico chiapaneco: “Campana Chiapaneca”. Cinco meses más tarde, en octubre, apareció el segundo: “El Para-rayo de la Capital de Chiapa”, bajo la inspiración de fray Matías de Córdova. Tras su estancia en la ciudad de México, regresó a Chiapas. En 1830 se le nombraba gobernador del estado, pero el ascenso de Anastasio Bustamante a la presidencia de la República le hizo declinar el cargo. Finalmente, dos años más tarde, llegaba a la gubernatura, en la cual habría de permanecer tres años. Su gobierno coincidió con el periodo del vicepresidente Valentín Gómez Farías, quien habría de poner en práctica leyes contrarias a los bienes de la Iglesia y buscaría mantener el Patronato Real. La oposición de la Iglesia le condujo a exiliar al obispo de la diócesis, fray Luis García Guillén. Al comenzar el año 1835 tropas enviadas por Antonio López de Santa Anna derrocaron al gobierno de Gutiérrez. Refugiado en Guatemala, realizó incursiones dentro del territorio chiapaneco con el fin de derrocar al gobernador impuesto, el militar José Ignacio Gutiérrez. Sus esfuerzos fueron en vano. Al parecer, no llegó a contar con el apoyo de un número significativo de sus paisanos, como lo demuestra el que haya tenido que abandonar Tuxtla. A principios de 1837 incursionó en Comitán, pero se vio precisado a retroceder. Al año siguiente avanzó sobre Tuxtla donde se atrincheró. Atacado el 8 de junio, el combate se prolongó durante varias horas, pero el resultado no favoreció a las fuerzas de Joaquín Miguel Gutiérrez, quien fue ejecutado por algunos soldados al intentar escapar.

6En 1848 el gobernador Fernando Nicolás Maldonado agregó el apellido Gutiérrez a Tuxtla.