Asociación para el Fomento de los Estudios Históricos en Centroamérica

1Esta obra contiene extractos de los protocolos de los escribanos cuyos apellidos empiezan con las letras de la A á la D, que cubren la temporalidad de 1567 a 1648. Estos escribanos son: Cristóbal Aceituno (1583-1613); Luis Aceituno de Guzmán (1567-1584); Juan Beltrán (1625-1630); Juan Bravo de Lagunas (1615-1625); Jerónimo de Castro (1625-1631); Pedro de Caviedes (1618-1640); Hernando Delgadillo (1620-1633); Felipe Díaz, el viejo, (1622-1648); Marcos Díaz (1598); Pedro Díaz de Cuellar (1604) y Francisco Díaz Enríquez (1610).
Este trabajo es el resultado de una labor larga y pesada, sin embargo, no es completo por cuanto no contiene los resúmenes de todos los documentos públicos contenidos en los protocolos que consultó el autor. Esta limitación tiene su razón en los intereses que movieron al autor para realizar su trabajo, los cuales le dieron la pauta para aplicar ciertos criterios en la selección de la temática contenida en las escrituras. Aplicó criterios ambiguos de exclusión e inclusión de un mismo tipo de documentos, tal y como se menciona en el prólogo del libro: «_No se han incluido sistemáticamente datos sobre las escrituras de servicio, fianzas, fletamentos, obligaciones, poderes y otras, que son numerosísimas pero poco variadas, pero sí se extractaron algunas de ellas que consideré interesantes por las referencias a los temas que menciono anteriormente._» La temática que le interesa al autor de los extractos son, en primer lugar, sus raíces familiares, y luego los orígenes y descendencia de los primeros pobladores españoles de la ciudad de Santiago, para continuar con los parentescos y los contratos de compraventa de bienes inmuebles, principalmente urbanos. La subjetividad determina la selección, pues dentro de la temática mencionada realizó los extractos de los documentos que he considerado de interés, como él mismo lo menciona.
A pesar de lo anterior, es una obra de consulta obligada para algunos investigadores con limitaciones que les impiden consultar las fuentes de primera mano, producidas por los escribanos de la época colonial de Centroamérica.