Asociación para el Fomento de los Estudios Históricos en Centroamérica

1Fowler demuestra un excelente uso de los documentos inéditos del Archivo General de Indias, especialmente los de Guatemala 128, y de la Relación Marroquín, transcrita y publicada por Francis Gall, para calcular la población de El Salvador al momento del contacto con los españoles (véase Marroquín 1968).

2Utiliza tres métodos distintos para determinar el tamaño de la población antes de la devastación que acompañó al brote de la primera pandemia prove­niente del Viejo Mundo (1519) y previo a la llegada del ejército invasor de Alvarado (1524). El Método 1 consiste en un cálculo basado en el tamaño aproxi­mado de los ejércitos nativos que enfrentaron la fuerza invasora de Alvarado en los primeros días de la conquista. El Método 2 es una síntesis regresiva de la Relación Marroquín (1532) y de las tasaciones de tributos del presidente Cerrato (1548–1551); y el Método 3 se basa en consideraciones de la capacidad de sustento. Por medio de estos tres métodos, Fowler obtiene cifras que se encuentran dentro del mismo rango general. Calcula que la población indígena de El Salvador en 1519 probable­mente oscilaba entre 700,000 y 800,000 personas. En 1524, en la víspera de la invasión española, ya había sufrido un descenso a entre 400,000 y 500,000 personas. Como lo sugirió Carl O. Sauer, existe una convergencia notable entre las cifras de los nativos americanos en el momento del contacto y los totales de las poblaciones nacionales en la primera mitad del siglo XX. En este contexto, las estimaciones de Fowler para 1519 y 1524 pueden ser consideradas conservadoras, ya que la población total de El Salvador en 1950 era un poco menor de 1,900,000. Una característica importante y sumamente útil del estudio realizado por Fowler la constituye el Cuadro 4, que contiene la mayoría de las estima­ciones demográficas más recientes para toda la Centroamérica española (excluyendo Chiapas) poco antes de la conquista. La forma en que se manejaron los datos demográficos en esta obra se repite, con material adicional sobre Nicaragua, y se coloca dentro de un contexto histórico y cultural más completo en Fowler (1989).