Asociación para el Fomento de los Estudios Históricos en Centroamérica

1«Miguel Matheo procurador de Pedro de Velasco, vuestro contador juez oficial real de la provincia de Honduras, como mejor haya lugar de derecho, digo que es así que el capitán Juan de Miranda, vuestro gobernador de aquella provincia, deseando sumamente favorecer las causas de doña María Flores, viuda, mujer que fue del tesorero Lucas García de Ayala y madre de don Juan de Ayala, su hijo, que sucedió al dicho su padre en el cargo de tesorero y que sus haciendas y caudales permanezcan y no sólo hubo disposición y orden para depositar todos sus bienes de los dichos tesoreros que se presentaron y embargaron por lo que podían darse en las personas de Alonso Gallegos y Alonso García Suelto, el uno cuñado de la dicha doña María y el otro sobrino suyo que no son abonados ni arraigados, pero llevado del odio y mala voluntad que al dicho contador, mi parte, tiene con animo de su destrucción y ruina por algunos injustos motivos que tiene y expresan, siendo necesario, ha tomado por medio para hacerlo, el color del celo del perjuicio … para tomarle las cuentas de todo lo que ha sido a su cargo en el tiempo que ha desempañado dicho oficio hasta ahora, diciendo y aplicando en diversas ocasiones que sin embargo de las adiciones … el dicho mi parte diese ... pueda venderle todos sus bienes excusando, en cuanto le sea posible el daño de la dicha doña María Flores y que siendo así que se manifiesta la voluntad del dicho juez tan en odio y contraposición de la equidad y justicia y que el dicho mi parte tiene asegurado cualquier alcance que se le haga justamente con fiadores ricos y abonados y con la hacienda que tiene, que es suficiente y bastante, y el fin a que se mira es sólo al entero, haber si algo se debiese sin la destrucción de los dichos ministros y de sus bienes y fiadores, cmo se seguiría necesariamente vendiéndose a menos precio en tierra tan corta, donde no hay compradores sino son los que quisiese el dicho gobernador que haya todo lo que no es de la intención de V. A. sino que pague lo que justmente se debiere con medios que se aparten de extremos tan dañosos, demás de no haber en aquella tierra, hombres que tengan verdadera inteligencia de las materias de cuentas, adiciones ni alcances, ni el dicho gobernador lo es en ellas, cuando no fuera tan conocida su mala voluntad, y para que todos estos inconvenientes y daños cesen y se administre justicia como conviene
A V. A. pido y suplico se sirva de mandar librar provisión real en que se mande al dicho gobernador que en el progreso de las dichas cuentas admita las adiciones [folio 2] descargos y alegaciones, papeles y certificaciones y dichos despachos que el contador presentare y dijere para justificación suya como la tiene en todo lo que ha sido a su cargo y en cualquiera suceso no determine definitivamente ningún alcance por líquido sin enviar primero los autos a esta Real Audiencia para que en ella se vea y determine si tiene justificación o no, o a lo menos cuando este lugar no haya … en causa tan grave que determine con asesor ….
Otro sí, a V. A. pido y suplico mande que por la falta de abono de los dichos Alonso Gallegos y Alonso García Suelto depositarios de los bienes de los dichos dos tesoreros difuntos se renueven los depósitos que … hubieren hecho, en otras personas llanas y abonadas para que mejor se asegure lo que a vuestra real caja se debiere …
Miguel Matheo»